¿Cómo podemos hacer que las evaluaciones sean importantes y útiles para los estudiantes?
A pesar de la mala prensa que las preocupaciones sobre los exámenes estandarizados le han dado, las buenas evaluaciones son esenciales para analizar y desarrollar el aprendizaje.
El término “evaluación” engloba múltiples estrategias e instrumentos, desde exámenes tradicionales a los comentarios de nuestros compañeros en proyectos de la vida real.
Una cultura positiva de evaluación puede capacitar a todos en la comunidad escolar ⏤educadores, familias y estudiantes⏤ y promover la equidad.
Sin evaluaciones, ¿cómo sabríamos si los estudiantes están aprendiendo y acercándose a sus metas, incluyendo el estar plenamente preparados para la universidad y sus carreras? ¿Cómo sabríamos si algunos estudiantes no reciben lo que necesitan para rendir y destacar? ¿O cuándo los estudiantes se están encontrando con obstáculos? La respuesta es sencilla: no lo sabríamos.
Las evaluaciones no son tan solo exámenes y pruebas de control. Las evaluaciones son herramientas distintas para medir y documentar el progreso. También pueden dar soporte al aprendizaje, intensificar el compromiso de los estudiantes con su propio trabajo y capacitarlos como aprendices. Las escuelas pueden incorporar métodos del mundo real para que los estudiantes muestren a sus maestros y comprueben ellos mismos lo que han aprendido. Nos solemos referir a esto como evaluaciones auténticas. Incluyen pruebas de desempeño, portafolios de trabajos de estudiantes y experiencias finales, todas las cuales proporcionan oportunidades para que los estudiantes demuestren su dominio de contenidos diversos y una variada gama de habilidades. Las escuelas también pueden desarrollar el aprendizaje para dominar materias adoptando prácticas de evaluación equitativas centradas en la evaluación auténtica del aprendizaje probado de los estudiantes y formando parte de un enfoque innovador de la enseñanza y el aprendizaje.