¿Cómo podemos repensar cuándo, dónde y cómo tiene lugar el aprendizaje?
Las escuelas innovadoras usan el tiempo, el espacio y la tecnología de aprendizaje de manera fluida y creativa.
Las escuelas pueden abrir nuevas y emocionantes vías para el aprendizaje centrado en el estudiante si se enfrentan a estas viejas premisas sobre las instalaciones, los horarios y los programas de instrucción.
El tiempo, el espacio y la tecnología son recursos que las escuelas pueden manejar con cuidado y bien. Si somos flexibles y creativos con el tiempo, podemos capacitar a los estudiantes y a los maestros para diseñar experiencias de aprendizaje que funcionen para ellos. Si usamos el espacio de modo distinto y pensamos más allá de los límites tradicionales de las aulas, podemos aprovechar nuestras comunidades inmediatas y el mundo en general como entornos de aprendizaje verdaderamente excepcionales. Finalmente, si aplicamos la tecnología de manera eficiente y adecuada, las escuelas pueden mejorar el aprendizaje del estudiante, expandir las capacidades de los maestros y dar viabilidad a un aprendizaje personalizado de gran calado. Tenemos que lograr que tiempo, espacio y tecnología amplíen el aprendizaje del estudiante, no limitarlo.
Preguntas para explorar y debatir: